El acabado nanotexturizado de Apple no solo ofrece un detalle mate perfecto para leer y pasar horas delante del ordenador, también elimina los molestos reflejos de las pantallas con luz directa.
ElMacBook Pro con chip M4es un gran portátil, potente, con gran autonomía y perfecto para profesionales, pero si hay un elemento que ha sido lo que más me ha gustado es su pantalla.
Por defecto, la pantalla del MacBook Pro es estándar como hasta el momento, brillante y con acabado de cristal. Este tipo de pantallas tienen un gran problema: los reflejos. Con un foco de luz directa es fácil verse reflejado en los oscuros y necesitas aumentar el brillo a un nivel máximo para poder ver algo, con el gasto de batería que ello conlleva.
Desde esta generación de portátiles con chip M4, tienes la posibilidad de comprarlo con una pantalla de acabado nanotexturizada, es decir, un acabado mate y antirreflejos que tiene sus pros y sus contras.
La última vez que Apple tenía un MacBook con pantalla de acabado mate fue entre 2008 y 2011. Ahora –por 170 euros extra– Apple te instala una pantalla con este acabado que marca la diferencia si eres una persona que trabaja en un lugar con muy buena iluminación.
Para un equipo que cuesta de base cerca de 2.000 euros, añadir 170 euros no es para tanto, sobre todo teniendo en cuenta que la calidad de imagen no se ve afectada y el efecto mate es perfecto para personas que pasan demasiadas horas delante del ordenador.
Fui muy fan de la pantalla nanotexturizada del iPad Pro de 13 pulgadas con M4 que analicé hace algún tiempo, aun así, en un iPad es un elemento menos necesario. En un portátil, al pasar tantas horas de uso delante de la pantalla, es mucho más importante.
El chip M4 es una bestia de rendimiento, pero mucho mejor lo serán los M4 Pro y M4 Max
No puedo olvidarme que una de las mejores características de este portátil de Apple es el rendimiento del chip M4. Por primera vez desde la llegada del chip M1 en 2020, noto que es un procesador merecedor de la actualización si tienes un M3.
No estoy diciendo que si tienes un M3 el cambio vaya a ser bestial, no, pero hay en ciertos casos donde las mejoras de rendimiento multinúcleo pueden ser de gran ayuda. Sobre todo para profesionales que usan programas de edición de fotografía y de vídeo.
La mejora generación a generación nunca fue el fuerte de los chips de Apple, pero esta vez, gracias al empuje de la inteligencia artificial, estoy seguro de que muchos desarrolladores, diseñadores y creadores se pensarán muy poco si actualizarse o no al modelo más barato de los nuevos MacBook Pro.